Dos visiones en debate
Cherem, Silvia S.,
(2006), Examen final: la educación
en México (2000-2006), 2 tomos,
crefal-El Equilibrista,
México, 707 pp. isbn i:
968-5011-71-0, ii: 968-5011-72-9
La visión optimista
El tomo i de la obra de Silvia Cherem nos lleva por una profunda entrevista con quien fue
secretario de Educación Pública en México, Reyes Tamez Guerra, durante el
sexenio 2000-2006.
La entrevista
que logra Silvia Cherem –y sin ánimo de minimizar el
esfuerzo de la periodista–, en algunos momentos carece del rigor deseado por
algunos (me cuento entre ellos) para desentrañar aún más la evidente situación
de deterioro y atraso en que se encuentra el sistema educativo mexicano.
La lectura es
ágil y, en ciertos momentos, amena. Silvia Cherem nos
lleva de forma sencilla a conocer el currículo profesional y académico de un
funcionario del gobierno del cambio, reclutado por un equipo de head
hunters (cazadores de
talentos), como él mismo lo manifiesta. Tamez Guerra relata sus actividades
como líder estudiantil, su época de estudiante de posgrado en la Universidad
Autónoma de Nuevo León (uanl) y el
Instituto Politécnico Nacional (ipn)
hasta su experiencia como rector de la uanl,
antes de ser seleccionado secretario de Estado. Resulta
interesante analizar la trayectoria profesional y académica de un personaje que
dirigió el destino de la educación en México, ya que, en sexenios anteriores,
la experiencia laboral y la preparación académica eran características
desconocidas de los miembros del gabinete.
La inexperiencia
de Reyes Tamez en asuntos de educación (sobre todo en los niveles básico y
medio) y políticas educativas marcaron el derrotero de su gestión como
secretario de Educación Pública, al frente de una de las instituciones más
difíciles de administrar por la naturaleza de su propósito y los actores que la
conforman, entre ellos el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (snte) y la Coordinadora Nacional de
Trabajadores de la Educación (cnte).
Reyes Tamez emprende y logra poner en marcha de forma parcial tres programas
que hacen énfasis en la calidad educativa: el Programa Nacional de Lectura (pnl), el Programa Enciclomedia
y el Programa Escuelas de Calidad (pec),
los cuales en el corto plazo se convertirían en punta de lanza del gobierno de
Vicente Fox.
Acerca del
rezago educativo, la posición de Reyes Tamez es clara, convencido de la
efectividad de los programas educativos, su discurso se vuelve predecible,
repetitivo y sin contenido, argumentando desde diferentes puntos de vista las
bondades y ventajas de las acciones emprendidas. Lo anterior no quiere decir
que quien esto escribe esté en contra, pues existen elementos de gran riqueza
en las propuestas que estructuradas y llevadas a cabo de forma diferente,
podrían colaborar en la resolución de problemas educativos desde el punto de
vista operativo.
En relación con
el snte, toma distancia y
argumenta que no existió conflicto alguno. Esto podría ser verosímil si no
existiera el antecedente corporativista del mayor sindicato de México. Renuente
a responder las preguntas en materia de políticas públicas y toma de decisiones
en la sep. Se manifestó como una
persona respetuosa y comprometida en todos los actos y acuerdos entre la
Secretaría de Educación Pública (sep)
y el snte.
La visión crítica: la
voz de los expertos
En contraste con
Reyes Tamez, en el segundo volumen los expertos en educación no comparten su
optimismo en relación con la crisis que atraviesa el sistema educativo. Los
problemas son de índole diferente y se presentan en los tres niveles de
educación. Además de lo anterior, al fenómeno se suman las dificultades que
traen consigo los nuevos programas educativos dirigidos al nivel básico, que se
relacionan con la ejecución, cobertura, operación y capacitación de los
profesores. El nivel medio continúa desatendido y estancado mientras que las
instituciones de educación superior continúan en su lucha por mantener su
autonomía.
Los diagnósticos
y las críticas no se dejan esperar, de acuerdo con la opinión de los expertos:
la crisis educativa se encuentra en su punto más álgido. Las opiniones de éstos
se enfocan en diversos aspectos de la problemática y atenderlas sería el punto
de partida para una posible solución a las múltiples dificultades. Los
problemas son de antaño, se dejaron a la deriva por razones políticas,
operativas, administrativas, o simplemente por falta de voluntad.
Los
especialistas coinciden en varios aspectos, entre ellos, educación para todos y
de calidad; al parecer ya se dio el primer paso, pero hace falta más que una
computadora en el aula para que sea de calidad. ¿Más cobertura? Sí, pero bajo
qué condiciones. ¿Evaluación? Totalmente de acuerdo, pero con qué mecanismos y
criterios, ¿los de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico (ocde) y la Organización
para la Educación, la Ciencia y la Cultura (unesco)?,
o deberíamos empezar a crear los nuestros, basados en las características
sociales, psicológicas y culturales de nuestros niños y jóvenes, además de
aspectos económicos y políticos del país. ¿Se necesitan más bibliotecas? Sí,
pero quién las opera y en qué condiciones. ¿Qué tipo de libros deben leer los
estudiantes?
¿Escuelas
laicas? Al parecer esta fue y es la pregunta de los gobiernos de derecha, la
respuesta es sencilla: sí, y Carlos Monsiváis tiene argumentos
sólidos para soportarla. Por supuesto se respeta el derecho de cada individuo
de profesar la religión o culto que más le convenga. El federalismo se
convierte también en asunto prioritario, el gigante burocrático ya no puede
más. Es necesario dar autonomía a los estados en materia educativa para atender
sus necesidades de forma eficiente y eficaz, sin tener que esperar el mandato
de los altos directivos de la sep
y del snte.
Por todos es
conocido que la hegemonía del snte
en materia de asuntos educativos ha sido el mayor lastre en el desarrollo de
una educación de calidad. El corporativismo sentó sus bases y al parecer la
tarea de sanear el sindicato y ponerlo a hacer lo conducente no es prioridad en
la agenda educativa de los gobiernos panistas. Carlos Ornelas da un escenario
preciso de la participación del snte
en el desarrollo educativo, desde su fundación hasta la época del liderazgo de
Elba Esther Gordillo.
Universidades
‘patito’, aspectos culturales, democratización de la educación, más capacitación
del magisterio y de los docentes en los niveles medio y superior, disminución
de la nómina del magisterio y más inversión en materia operativa, así como la
puesta en marcha de programas de calidad, también son puntos relevantes y que
están en el foro del debate de uno de los aspectos más importantes en el
desarrollo de un país: educación.
Recibido:
6 de julio de 2007.
Aceptado:
6 de julio de 2007.
Ricardo Ángeles Escobar
Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica
correo-e: trexraven@prodigy.net.mx
Ricardo
Ángeles Escobar.
Es licenciado en administración por la Universidad Autónoma Metropolitana.
Actualmente realiza estudios de maestría en desarrollo y planeación de la
educación en la misma institución. Su línea de investigación actual es el
binomio escuela-trabajo. Es profesor de tiempo completo en el Colegio Nacional
de Educación Profesional Técnica (Conalep) donde imparte materias de
administración.